
Para nadie es un misterio que la recompensa es uno de los motores fundamentales del desarrollo personal. La motivación de muchos de nuestros actos están condicionados a ese momento de gratificación que es obtener algo a cambio de una acción o transacción.
La teoría del intercambio social define esto como : “todas las relaciones humanas se forman por el uso de un análisis de coste-beneficio y la comparación con alternativas”, para simplificar todos nuestros actos están motivados por esta suma y resta de costo y beneficio, incluso los actos de desprendimiento o filantropía donde parece que el individuo que ejecuta este acto pierde en la transacción, es un análisis errado, debido a que la recompensa no necesariamente debe ser material y el valor de la recompensa está sujeto a tasación del que ejecuta la acción, es por eso que existen persona capaces de comprar un un teléfono inteligente en 2.000 USD y otros no, cuando el objeto sujeto a la transacción materialmente es el mismo.
Bibliografía sobre este comportamiento hay por montones Thibaut y Kelley (1959), Kelley y Thibaut (1978), Homans (1961) y Rusbult (1983), por mencionar algunos, pero lo importante de comprender este comportamiento es que podemos utilizarlo a nuestro favor al momento de diseñar un curso ya que existen recompensas macros que podría ser el aprobar el curso y recompensas micro que puede ser dividir la totalidad del curso en micro recompensas basado en los contenidos.
Vamos a imaginar un ejercicio práctico de este método para que se entienda un poco mejor este recurso.
Tenemos el curso de Matemática Elemental donde se piensa enseñar las 4 operaciones básicas de la aritmética, sumar, restar, multiplicar y dividir.
El objetivo final es aprobar el curso, pero si nos percatamos el curso tiene 4 tópicos que independiente de estar relacionado son independiente uno de otro, entonces podemos generar 4 reconocimientos independientes basado en el resultado de cada una de estas operaciones.
Entonces diseñamos un primer módulo llamado Suma donde presentaremos toda la información de esta operación aritmética y al final de ese módulo realizamos una micro evaluación que puede entregar un reconocimiento, medalla, insignia o lo que sea.
Utilizando el puntaje obtenido se puede definir 2 niveles bueno y experto y asociar el tópico a esa insignia por ejemplo si supera el 60% y está bajo el 85% otorgar la insignia de buen sumador, en cambio si obtiene más de 85% otorgarle la de experto sumador.
Este ejemplo es de un estímulo concreto donde se obtiene un reconocimiento tangible, también podemos hacer uso de los estímulos motivacionales que pueden parecer menos importante, pero si lo piensas así es un nuevo error, los feedback de refuerzo permiten motivar al estudiante donde es importante generar el estímulo, durante el proceso de aprendizaje, el ensayo y error es parte fundamental y pilar base de nuestro aprendizaje, y si este está reforzado por un mensaje positivo aumenta aún más el proceso de aprender.
Esta metodología de enseñanza la utilizamos de forma natural a lo largo de nuestra vida y responde a un modelo denominado conductismo ampliamente documentado y estudiado por psicólogos, antropólogos y pedagogos.
Dominar y utilizar este tipo de conocimiento para aprovechar lo mejor de ellas en la educación es una de las claves de diseñar experiencias de aprendizaje exitosas.